A los padres y madres nos preocupa la salud dental, el crecimiento y el desarrollo de nuestros pequeños. Por esto, es importante saber cuándo está llegando la hora exacta de llevarlos al odontopediatra. Después de esta primera visita, el especialista determinará qué tratamiento seguir. En este artículo lo explicaremos detalladamente, ya que creemos que la infancia es el momento ideal para corregir algunos errores que pueden aparecer en edades más avanzadas si no se tratan. 

Qué es la ortodoncia infantil

La ortodoncia infantil es un diagnóstico para analizar problemas bucodentales graves y tomar medidas eficaces para sanarlos, afirman expertos de Medina Dental Clinic. Estos problemas son tanto funcionales como estéticos, entre ellos los incisivos prominentes, el paladar estrecho, la falta de espacio para el resto de piezas, entre otros. 

En esta lista exponemos los tres grandes tipos de ortodoncia infantil:

  • Pre-ortodoncia temprana (3 a 6 años): En este caso hablamos de aparatos de ortopedia -específicamente, los removibles, es decir, los de quitar y poner- para corregir ciertos hábitos a temprana edad, así como chuparse el dedo constantemente o una mala posición de la lengua. De no cortar esta manía, se ocasionarán problemas a lo largo del tiempo, como por ejemplo, una mordida cruzada o abierta. 
  • Pre-ortodoncia funcional o ortodoncia interceptiva (7 a 11 años): hablamos de ortodoncia interceptiva para lograr mitigar los efectos de unos hábitos anormales. Por ejemplo, una manera para corregir el paladar estrecho y que no tenga repercusiones más adelante es usando expansores maxilares. 
  • Ortodoncia dentición permanente (12 a 18 años): es el caso de un tratamiento para, sobre todo, un mal alineamiento de los dientes. Este problema puede  provocarse por cuestiones genéticas o malos hábitos durante la primera infancia, así como el uso excesivo del chupete o la succión del dedo por la boca. En esta edad, se pueden utilizar diferentes aparatos, así como los fijos, también llamados brackets. 

Otros consejos útiles 

Ya hemos aportado nuestros conocimientos respecto a los tipos de ortodoncia que hay. Por ello, ahora también es importante tener en cuenta otras cuestiones, entre ellas las molestias que pueden sentir los niños al llevarlos al ortodoncista. Normalmente, con el paso del tiempo, estas incomodidades desaparecen, pero si no es así, es necesario comunicárselo al experto. 

Además, según la Sociedad Española de Ortodoncia (SEDO) es aconsejable una primera revisión dental a los siete años, ya que es cuando aparecen los incisivos y los primeros molares. Sin embargo, a los cuatros años el ortodoncista ya puede identificar posibles alteraciones de maloclusión.

Por último, y no menos importante, tenemos que tener en cuenta que, en el caso de utilizar aparatos fijos, el niño ha de extremar las medidas de higiene, por ejemplo, con un correcto cepillado después de comer. De no ser así, pueden aparecer caries, porque se retienen restos de comida y placa entre las dientes. Por otro lado, en relación a los aparatos removibles, se recomienda lo siguiente: el cepillado antes de colocarlo y cuando se retira, siempre limpiandolos con agua y jabón neutro.

Los niños tienen que ser muy conscientes de las medidas de higiene que tienen que tomar desde el momento que se le implanta el tratamiento. Es más, es recomendable inculcarles la importancia del cepillado después de cada comida. ¡No demores la visita!